Querido lector en esta noche no planeo usar un lenguaje barroco, hoy abrazo la belleza de la simpleza, como una moneda que gira en el aire con el misterio sobre si será cara o cruz, hoy uno mi aliento al viento de occidente para que la brisa oriente a todo aquel que siente y entiende mi sentir, mi visión del día a día, con alegría le regaló mi existir, esta es mi imprecisa despedida la vida, pero precisa al mismo tiempo pues al llegar al momento dudo poderme despedir, no te alarmes, no hablo del suicidio ni nada que rápido mi muerte consiga, confieso que me aburre la vida a veces, mi gota de brillo se desvanece momentáneamente, pero no por eso voy a cortar mi vida o adelantar mi viaje sin retorno al olvido.Traté de plasmar la vida en los reglones y jamás calle mi opinión, ninguna emoción, no queda ningún recoveco, ni hueco donde falte buscar, todo está aquí, mi definición de la vida y la muerte, el azar y mi suerte, mi amor y me odio, mis pasos en el sendero de la vida rumbo al manicomio pero pocos escuchan y ven los ESGRITOS del mudo,un canto maldito, tan agudo y finito pero con infinitos mensajes, miles de viajes por los pasajes metafísicos de la empatía, palabras y frases con veneno y sin relleno que concientizan al humano por su indiferencia al dolor ajeno, creando llagas que drenan el menester del querer hacer daño para lograr un futuro mejor por año y una vida plena donde no hay urgencia por sobrevivir sino la amena dicha de saber vivir, esa es mi visión otorgada por nuevos villanos y falta de voluntarios, si vivimos con abundantes hombres sin huevos y mujeres sin ovarios y en su lugar quedan fracasos y tipos ordinarios, NO. No quiero vivir así, yo quiero guerreros que se queden, que peleen por mantener la paz en el mundo y defender lo que el corazón desee, quiero un país donde importe más lo intro que lo extro, donde los pretextos sean ignorados, donde los delirios y la impotencia sólo se hallen un libro de historia, un mundo donde las diferencias unan y las semejanzas construyen, quiero que los sueños se apoyen, quiero que un camino donde andemos todos, donde el lodo sirva para jugar y no para hundirse, yo sé que es patético, mucha rosa y poca espina. Pero, dime querido lector ¿No es ese el mundo en el que todo niño vivir imagina? Tenemos la fuerza, las ganas y sabemos cómo lograrlo, de críos si quieres puedes se nos dice y si es así ¿Cuál es el óbice que nos frena? Es que acaso con el ocaso se acaba la vida, no, llega la noche y sin reproche llega un nuevo día, he tenido una epifanía en ella la distancia se extinguía, las diferencias culturales creaban ideales, la verdad no requería vestirse para mostrar beldad, pues en realidad ésta no duele, sé que desean un mañana donde la coacción sea vana y el amor sin mucha lucha triunfe pues la gente escucha y no dude en cooperar para así labrar esa semilla que germine y cuyo fruto sea la esperanza, este mensaje es la puerta un paisaje lleno de vida y quiero que él próximo que escriba sólo gaste tinta para hacerme una oda y que como título esté plasmado un gracias color zafiro y así esté muerto o vivo saber que valió mi sueño, una utopía de la que no solo yo soy dueño, pero anhelo como si lo fuese, eso te dejo lector, un deseo que seduce el alma hambrienta de paz, las ganas de un mañana donde el verde domine y sin importar la hora en la que se camine no haya alerta o duda de que llegaré a la puerta de mi hogar, te heredo mis ansias que en el papiro he plasmado por tres lunas, es mi regalo para ti, MI LEGADO.
A veces, el cliché más cobarde y poco basto no es más que un nefasto bastón para pasos agostados y mensajes estertores de un libre esclavo buscan salir. Yo siempre callo, porque al hablar fui censurado, tener amigos no siempre es estar acompañado y tener a solo 2 es lo que necesito para mí Trinidad. Cabeza, cuerpo y determinación, mis amistades más queridas, les regalo mi voluntad de pelear de por vida. Mas no me juzguen si caigo de vez en cuando, hasta las estrellas se toman su descanso y el árbol más fuerte tiene derecho de dormir. Baila el loto en su infierno, baila el escritor en su cuaderno, baila el bisturí en una pista azul y roja para beber el elixir y embriagarse al terminar la hoja... Y es que ¿Quién dijo que el punto es el final? Cuando estos se suspenden dejan en coma la realidad. Los mejores paréntesis son aquellos que nos unen mirándose cuando nuestras personas nos demuestran que es la vida. Los mejores corchetes son hacia abajo cuando el producto de dos genera un tercer
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