Estrella Polar

Querida estrella, confieso que puedo verte, muchas veces tente  a  mi suerte por tratar de buscarte, sin embargo no consigo llegar al estandarte para poder mirarte completamente, veo un atisbo de tu luz, quizá el camino a ti sea mi cruz, no importa donde esté, la vida es como un frisbee pues parte de mi con rumbo a ti y sólo tu lo puedes enviar de regreso, se el titiritero que tirita nuestros pasos, con la compañía de un whisky podamos rebalsar lo malo que de nuestras vida que se halla en la cúspide del vaso, muchas veces hay fracaso, muchas veces hay penumbras, sin importar cuán lúgubre esté el camino siempre me alumbras y me das la vida que tanto quiero, un objetivo, una meta, no importa con tal de recibir tu ósculo, si el crepúsculo me abraza pues, caminaré rumbo al alba y la calma será la luz efímera que alumbre mi alma, quiero darte las gracias por estar siempre ahí, por darme un paso más, un día mas, un mes más, un año, una década quizá, pero el camino hacia ti es tan difícil, a veces ando inverosímil por dudar de mi rumbo, otras veces el sendero es quimérico, sentirse tan demente y cuerdo al mismo tiempo, no importa que tan demente pueda estar el ser humano, si algún día llegó encontrarte, espero tomar tu mano para decirte: vamos directo al exilio, donde un grito de auxilio no pueda ser oído, pero no será necesario pues siempre estaremos unidos, gracias, es todo lo que te quiero manifestar, a ti mi luz del camino, la guía de mis pasos.
GRACIAS MI ESTRELLA POLAR.